¿Cuál es la realidad oncológica en Panamá?

Según el Ministerio de Salud de Panamá, se reportaron más de 7,000 nuevos casos de cáncer en el país en 2018, de los cuales los más frecuentes son el de próstata, mama, colon y pulmón. En respuesta a esta carga de enfermedad, Panamá cuenta con una red de hospitales y clínicas que ofrecen servicios especializados en oncología. Destaca entre ellos el Hospital Oncológico Nacional, reconocido como el principal centro dedicado al tratamiento del cáncer en el país. Además, tanto en el ámbito público como en el privado, diversos hospitales disponen de departamentos de oncología equipados para brindar diagnóstico y tratamiento a pacientes.

En la última década, Panamá ha sido testigo de avances prometedores en el tratamiento del cáncer. Entre ellos, sobresale la introducción de terapias dirigidas, medicamentos diseñados para atacar células cancerosas específicas minimizando los efectos secundarios en las células sanas. Esta estrategia ha abierto nuevas puertas en la lucha contra el cáncer, ofreciendo tratamientos más eficaces y mejor tolerados por los pacientes.

Otro avance relevante es la adopción de la radioterapia de intensidad modulada (IMRT), una técnica de radioterapia de alta precisión que permite administrar dosis más altas de radiación en las células cancerosas mientras se protegen los tejidos circundantes. Esta precisión en la administración de la radiación contribuye a aumentar la efectividad del tratamiento y reducir los efectos secundarios adversos.

Además, el desarrollo de métodos diagnósticos más precisos, como la tomografía por emisión de positrones (PET), ha permitido una detección más temprana de tumores y una evaluación más precisa de la respuesta al tratamiento. Esto facilita la adaptación de las estrategias terapéuticas según la evolución del paciente, optimizando así los resultados del tratamiento.

En resumen, la oncología en Panamá ha experimentado avances significativos que han transformado la forma en que se aborda y trata el cáncer en el país. A medida que la investigación y la innovación continúan avanzando, se abren nuevas oportunidades para mejorar aún más la detección temprana, el diagnóstico y el tratamiento del cáncer. En este contexto, es esencial que los pacientes y sus familias accedan a la atención médica especializada lo antes posible, aprovechando los recursos y tratamientos disponibles para garantizar los mejores resultados en su lucha contra esta enfermedad.